Ortodoncia para adultos: brackets o alineadores invisibles?

Si pensabas que llevar aparatos de ortodoncia es sólo cosa de adolescentes, te equivocas. Cada vez hay más adultos jóvenes o personas mayores de 45 – 50 años que se benefician de estos tratamientos para corregir la alineación de los dientes. Los motivos para elegir estas opciones son variados: desde mejorar la estética hasta solucionar problemas funcionales o de salud bucodental.

¿Por qué puede ser necesaria la ortodoncia en la edad adulta? Porque unos dientes mal colocados o que no encajan bien pueden provocar alteraciones de salud como malas digestiones, apnea del sueño, pérdida de dientes, dolores de cabeza e, incluso, dificultades de pronunciación de determinados sonidos.

La diferencia con los jóvenes es que en edades maduras se trabaja con una dentición permanente y una estructura ósea con alteraciones consolidadas. La ortodoncia en adultos puede tratar y solucionar desde casos de apiñamiento hasta dientes separados o diferentes tipos de maloclusiones: la mordida abierta, la mordida cruzada, el resalte, la sobremordida…

¿Cuál es la técnica más recomendable para adultos? La elección varía en función de variables como la edad del paciente, el tipo de complicación a tratar, el precio y la estética de los aparatos. Hoy en día los brackets metálicos son los más convencionales y económicos, pero el mercado ofrece alternativas más atractivas y discretas para personas adultas como, por ejemplo, la ortodoncia invisible que permite hacer una vida normal sin que otros se den cuenta.

Estos son los diferentes tipos de ortodoncia para adultos que te ofrecemos a nuestra clínica:

Brackets de metal. Es el método más utilizado y popular. Se trata de unos cuadrados metálicos que se fijan a cada diente y van unidos por un arco de alambre sujetado por unas pestañas. Su principal ventaja es que es muy efectivo y mueve y corrige la posición de las piezas dentales de una forma más rápida. Ello hace que el paciente tenga que llevar la ortodoncia durante menos tiempo.

Brackets estéticos. Son cerámicos o de zafiro, se sitúan igual que los metálicos en la cara visible de los dientes, pero aportan discreción porque quedan disimulados con el mismo color del esmalte dental y resultan más desapercibidos.

Brackets linguales. Se colocan a la parte interna de los dientes y son invisibles a las miradas. Funcionan del mismo modo que los de metal. La desventaja este tipo de ortodoncia invisible es que necesita un tiempo de adaptación porque interfiere la forma de hablar del paciente. También es más complicada la higiene dental con los aparatos, por medio del cepillado rutinario.

Ortodoncia invisible (alineadores). Como alternativa estética a los brackets existen los alineadores dentales de la ortodoncia invisible. Se trata de unas férulas transparentes o aparatos removibles que se van sustituyendo y cambiando de manera periódica. Es la opción más cómoda e higiénica, porque puedes colocar y extraer las fundas para comer o para cepillarte los dientes. Sin embargo, este sistema no es recomendable para adolescentes porque pueden olvidarse de llevar puestos los alineadores o no cumplir con el tiempo necesario del tratamiento. Nunca es tarde para presumir de un sonreír muy cuidado.

Solicita una cita en el Centre dental Parc del Nord y te ayudaremos a conseguirlo.

Clínica dental Terrassa – Dentista Terrassa